Choques entre cristianos y la Policía israelí en Jerusalén en la víspera de la Pascua ortodoxa (VIDEOS)
Grupos de cristianos ortodoxos intentaron traspasar este sábado los cordones de seguridad en la Ciudad Vieja de Jerusalén para presenciar el antiguo ritual anual de la aparición de Fuego Santo, lo que se tradujo en altercados con la Policía israelí.
Las tensiones, que en algunos casos desembocaron en episodios violentos, se debió a la limitación de aforo impuesta por las autoridades israelíes en la iglesia de Santo Sepulcro, donde la Luz Sagrada desciende cada Sábado Santo, la víspera de la Pascua ortodoxa, que este año se celebra el 16 de abril.
Con el pretexto de mantener la seguridad pública y prevenir estampidas durante el evento, que habitualmente atrae a multitudes de diversos países, los agentes de seguridad limitaron este año el aforo a 1.800 personas.
En redes social circulan videos de choques entre feligreses y policías, que no les dejan acceder a la Ciudad Viejos. Algunos fieles intentan saltar las vallas y esquivar a los uniformados.
En algunas de las grabaciones se aprecia cómo la Policía arrastra o incluso golpea a creyentes que se negaron a obedecer sus órdenes.
Más de 2.000 agentes de seguridad se han desplegado para controlar la afluencia de creyentes, en medio de una polémica que se prolonga ya por espacio de una semana, desde que se diera a conocer la medida gubernamental.
El patriarcado ortodoxo griego condenó las restricciones, que tachó de violación de la libertad religiosa, e instó a los creyentes a llegar al santuario pese a las advertencias de Israel, informa AP.
La Luz Sagrada desciende cada Sábado Santo, en la víspera de la Pascua ortodoxa. Se trata de un ritual de más de mil de años que tiene lugar tras la oración del patriarca de Jerusalén, mientras todo el santuario permanece a oscuras y todas las luces están apagadas.
Los feligreses aseguran que la Luz Sagrada no quema la piel ni el cabello en los primeros minutos tras su descenso.
El fuego enciende las candelas de los creyentes e incluso es enviado en aviones a los países de la fe cristiana ortodoxa, como Rusia y Grecia.