Fútbol y represores: los escándalos que tensan la gira de Milei a Francia

El presidente de Argentina, Javier Milei, iniciará este jueves una gira en Francia rodeada de un clima de tensión debido a varios escándalos que combinan cuestiones deportivas y de derechos humanos.

Los problemas estallaron la semana pasada, luego de que la selección argentina de fútbol ganara la Copa América y difundiera un video racista de las celebraciones, en el que los jugadores se burlan del origen africano de los seleccionados de Francia.

La rivalidad entre ambos equipos quedó asentada desde que Argentina le ganó a Francia la final del pasado Mundial de Catar 2022. Y se manifestó el miércoles, cuando los sudamericanos fueron abucheados en su debut olímpico en el estadio Geoffroy-Guichard, de Saint-Étienne.

Desde el Mundial de Catar 2022 se popularizó una canción de cancha, que agrede a los jugadores franceses y que se repitió después de la final de la Copa América que Argentina se impuso ante Colombia.

Por eso, el equipo capitaneado por el ídolo Lionel Messi fue acusado de "racista" en el país europeo. La controversia escaló tanto, que el jugador Enzo Fernández, quien fue el que transmitió el video, se disculpó en redes sociales por el "lenguaje altamente ofensivo", en tanto que la FIFA comenzó una investigación por pedido de la Federación Francesa de Fútbol, que exigía sanciones por los "comentarios insultantes de carácter racial y discriminatorio".

Pero la polémica, en lugar de amainar, se intensificó de manera impensable cuando el subsecretario de deportes, Julio Garro, advirtió que Messi y el titular de la Asociación del Futbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, deberían disculparse con los franceses.

Entonces Milei entró en escena para desautorizar al funcionario, a quien despidió con un inusual comunicado.

Cuando parecía que el incidente estaba terminado, la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien está peleada con Milei, acusó a Francia de ser "un país colonialista" y advirtió que Argentina no se dejaría amedrentar.

Los represores

En ese momento faltaban escasos días para que Milei viajara a Francia, pero su vicepresidenta provocaba un conflicto diplomático con ese país.

La reacción de Milei fue criticar a Villarruel y enviar a su hermana y secretaria general de la presidencia, Karina Milei, a disculparse ante la embajada de Francia en Buenos Aires, pero la tensión sigue latente.

El escándalo de la selección argentina dejó en segundo plano un grave episodio que le puede traer más dolores de cabeza a Milei en su gira a Francia.

Se trata de la visita que seis diputados oficialistas realizaron a represores condenados por los delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar (1976-1983). Fueron a apoyarlos y a promover su liberación.

Entre ellos se encuentra Alfredo Astiz, uno de genocidas más temibles de la historia argentina, quien en 1977 secuestró, torturó y desapareció a dos monjas francesas, Alice Domon y Léonie Duquet. De hecho, antes de ser obligado a enfrentar a la Justicia argentina, el represor recibió en Francia una condena "en ausencia".

Con el pasar de los días, se profundizó el repudio de la visita, ya que forma parte de la política que lleva a cabo este Gobierno en contra de las luchas por la memoria, verdad y justicia que han protagonizado colectivos de derechos humanos con el apoyo de Francia y de gran parte de la comunidad internacional.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, intentó desligar a Milei de la controversia al asegurar que los diputados acudieron a la cárcel "a título personal", pero organismos franceses alzaron la voz para denunciar al mandatario.

Ni olvido ni perdón

Esta semana, la Asociación de Franceses Desaparecidos en la Argentina publicó una dura carta titulada '¡Francia no olvida!' en la que denunció que los diputados de Milei les aseguraron a los represores que sus condenas serán anuladas.

"Su vicepresidenta Victoria Villarruel, así como varios ministros y diputados de su partido, alimentan la intención de liberar a los criminales condenados", señaló.

También explicó que la visita forma parte de la "revisión negacionista" de una de las páginas más oscuras de la historia argentina.

"Mientras Javier Milei vuela a Francia, invitado por el el presidente (Emmanuel) Macron para asistir a la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, hay que hacerle acordar al presidente francés que el 16 de marzo de 1990, la Cour d'Assises de París condenó por contumacia a Alfredo Astiz a cadena perpetua por la desaparición de las dos religiosas", recordó.

Diputados de Milei visitan y defienden a represores de la dictadura y estalla escándalo

Además, precisó que sigue en marcha la investigación por la desaparición de 20 ciudadanos franceses durante la dictadura argentina.

"Ni los fastos de los Juegos Olímpicos ni las razones políticas o económicas deben hacernos olvidar la exigencia francesa de justicia", advirtió.

En este clima de confrontación, Milei emprendió en los primeros minutos de este jueves un viaje de solo dos días a París, en donde se reunirá con el presidente francés Emmanuel Macron.