Guardian: Las relaciones entre Londres y Kiev empeoraron con la llegada de Starmer al poder

La relación de Ucrania con el Reino Unido "ha empeorado" desde la llegada al poder del Gobierno laborista en julio, informó The Guardian el viernes, citando a funcionarios ucranianos.

El primer ministro británico, Keir Starmer, aún no ha visitado Ucrania cuatro meses después de tomar posesión de su cargo, pero, según el diario, su viaje sería inútil si no se compromete a reponer las reservas de Kiev de misiles de largo alcance Storm Shadow. "No tiene sentido que venga como turista", declaró un alto funcionario del régimen de Vladímir Zelenski.

"No está sucediendo. Starmer no nos está dando armas de largo alcance. La situación no es la misma que cuando Rishi Sunak era primer ministro. La relación ha empeorado", agregó.

Baerbock reitera su apoyo para enviar a Ucrania misiles de largo alcance

The Guardian señala que Ucrania está cada vez más descontenta con la política de Londres a medida que las tropas rusas avanzan en Donbass a una mayor velocidad desde 2022. Al mismo tiempo, la victoria electoral de Donald Trump en EE.UU. ha hecho temer en Kiev que Washington recorte o frene la ayuda militar a Ucrania, recuerda.

Starmer se reunió con Zelenski el jueves en la cumbre de la Comunidad Política Europea en Budapest. Pero el líder del régimen de Kiev denunció posteriormente en sus redes sociales, adjuntando una foto con Starmer, que "un elemento importante del plan de victoria es que proporcionen a Ucrania armamento de largo alcance y le concedan permiso para utilizarlo contra objetivos militares en territorio ruso".

• El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha advertido en repetidas ocasiones que si se tomara la decisión de permitir que Ucrania ataque lo profundo del territorio ruso internacionalmente reconocido con armas occidentales de largo alcance, significaría que los países de la OTAN "están en guerra con Rusia".
• El Storm Shadow es un misil de crucero sigiloso aire-tierra con un alcance de más de 250 kilómetros. Desarrollado conjuntamente por Francia y el Reino Unido (en Francia se lo denomina SCALP), ha sido suministrando a las Fuerzas Armadas de Ucrania desde el año pasado.