¿Qué pasará si Trump declara a los cárteles mexicanos como entidades terroristas?
En recientes declaraciones, el presidente electo de EE.UU. expresó su deseo de declarar como "organizaciones terroristas" a los cárteles mexicanos de la droga, en virtud del papel que juegan estas entidades en el tráfico y consumo de fentanilo, un flagelo que ha sido definido como "una crisis de salud pública" en el territorio estadounidense.
"Nos enviaron a sus pandilleros, autobús tras autobús. Teníamos una frontera abierta. Son pandilleros. Son traficantes de drogas. Son drogadictos. Gente enferma. Todos los pandilleros extranjeros serán expulsados y designaré inmediatamente a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras. Lo haremos de inmediato", prometió el Trump en un discurso pronunciado el 22 de diciembre en el AmFest 2024, una reunión celebrada en la ciudad de Phoenix, que congregó a personalidades conservadoras.
"Every single foreign gang and illegal alien member — all of this criminal network operating on American soil — will be dismantled, deported, and destroyed."@realDonaldTrump live at AmFest 2024 pic.twitter.com/OH9U55wCiC
— Turning Point USA (@TPUSA) December 22, 2024
De concretarse la promesa de Trump, Washington podría imponer sanciones económicas que no solo afectarían a las organizaciones criminales dedicadas al trasiego de drogas desde México hacia EE.UU., sino que también podrían resultar afectadas entidades o personas señaladas por las autoridades estadounidenses de proporcionar cualquier clase de apoyo a los cárteles, aunque ese vínculo sea desconocido para los sindicados, explica N+.
Sin embargo, esto no daría carta blanca a EE.UU. para intervenir militarmente en su vecino del sur, dado que las leyes estadounidenses contemplan que esto solo es posible si se designa a un Estado como patrocinador del terrorismo.
"No aceptamos injerencismos"
Este lunes, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, salió al paso de las declaraciones de Trump, asegurando que su país no se subordinará a EE.UU. ni aceptará "injerencismos" de ninguna clase porque es una nación soberana.
"México es un país libre, soberano e independiente y no aceptamos injerencismos en nuestro país", replicó la mandataria en su conferencia de prensa matutina. En ese mismo contexto, recordó que en noviembre pasado le envió una carta al futuro presidente estadounidense cuando este amenazó con imponer aranceles, si el Gobierno mexicano no tomaba medidas para frenar la migración y el tráfico de sustancias.
"Allá [en EE.UU.] se consume la droga principalmente, de allá vienen las armas y aquí ponemos las vidas. Eso no. Nosotros colaboramos, coordinamos, trabajamos juntos, pero nunca nos vamos a subordinar", dijo.
En la misma línea, aseguró que "más allá de la manera en que se expresa el presidente Trump", creía que "va a haber un acuerdo para todos los temas con EE.UU.", incluido el tráfico de drogas, pues considera que su país puede ayudar en la campaña antidrogas que ha anunciado el magnate republicano una vez tome posesión de su cargo, en enero próximo.
"Es algo que conversamos, él prestó mucha atención a la campaña que hizo el presidente [Andrés Manuel] López Obrador. Creo que hay que trabajar para tener una buena relación, pero no hay que 'engancharse' (caer en provocaciones) y escuchar bien lo que [Trump] está diciendo", completó.
Asimismo, el pasado 2 de diciembre, la presidenta mexicana descartó cualquier posibilidad de que el Gobierno autorizara el ingreso de personal militar estadounidense para combatir a los cárteles.
"Por supuesto que no estamos de acuerdo en una invasión, una presencia de este tipo", respondió a la prensa cuando fue inquirida sobre informes aparecidos en los medios estadounidenses sobre el supuesto interés de Trump de enviar a México funcionarios encubiertos para enfrentar a los cárteles.
¿Qué viene?
Pese a las incendiarias declaraciones de Trump, el Ejecutivo liderado por Sheinbaum ha optado por responder con firmeza en lo que respecta a la defensa de su soberanía e independencia, pero sin salirse de los cauces cordiales y recalcando siempre su interés en colaborar con las autoridades estadounidenses sin subordinación ni injerencias.
Por otro lado, aunque el mandatario electo optara por cumplir su promesa de declarar a los cárteles como organizaciones terroristas, es difícil que pueda presionar a las autoridades mexicanas con la imposición de aranceles debido al alto costo que esta medida acarrearía a la economía de su propio país, como ha puntualizado el secretario de Economía mexicano, Marcelo Ebrard.