
Se pronuncia el arzobispo al que Moldavia impidió viajar a Jerusalén por el Fuego Santo

El arzobispo de la Iglesia ortodoxa moldava, Markel, ha negado las acusaciones de la Policía de Moldavia sobre los motivos de que le impidieran viajar a Israel para recoger el Fuego Santo.
"Por favor, buenas personas, no mientan al menos hoy. Es Viernes Santo, cuiden su alma", afirmó a los periodistas al comentar la declaración de los guardias fronterizos, que dijeron que Markel perdió el avión porque llegó tarde al registro.
Asimismo, confirmó que este viernes hará un segundo intento de volar a Jerusalén.
El arzobispo fue detenido en el aeropuerto de Chisinau y sometido a un minucioso control, y solo le devolvieron los documentos cuando el avión ya había despegado. Según el Servicio de Fronteras, el clérigo no se presentó en el aeropuerto tres horas antes del vuelo, como exigen las medidas de seguridad introducidas recientemente.
"Acoso intencionado a los creyentes"

La Iglesia ortodoxa rusa condenó las acciones del Gobierno moldavo, calificando la decisión de "absolutamente descarada" y de "acoso intencionado a los creyentes de la Iglesia ortodoxa de Moldavia, la comunidad religiosa de la mayoría de los moldavos".
"Los asesores de las autoridades moldavas, que obviamente están lejos del cristianismo, creen que con esto resolverán algún problema político. ¿Creen que separarán a la gente de Cristo, impidiéndoles celebrar la Pascua? No, sino que, según las palabras del profeta David, caerán en el mismo hoyo que cavan para los demás", declaró el representante de la Iglesia ortodoxa rusa, Vladímir Legoida.
Mientras, desde la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos comunicaron que están recabando información sobre la interrupción del viaje.
- La presión sobre la Iglesia ortodoxa moldava forma parte de una amplia campaña del Gobierno de la presidenta proeuropea Maia Sandu dirigida a abolir todo lo relacionado con la cultura rusa en Moldavia. En este contexto, se está preparando una ley para abolir la enseñanza de la lengua rusa en las escuelas, mientras se persigue a políticos que desean mantener relaciones amistosas con Rusia y se cierran medios de comunicación considerados desleales
- El arzobispo Markel ha expresado reiteradamente su preocupación por las acciones conjuntas de la Iglesia ortodoxa rumana y el Gobierno moldavo contra la Iglesia ortodoxa de Moldavia, que forma parte de la Iglesia ortodoxa rusa. La Iglesia ortodoxa rumana, que también opera en territorio moldavo, había hecho anteriormente un llamamiento a las parroquias de la Iglesia ortodoxa de Moldavia para que se unieran a ella, lo que provocó un conflicto. La Metropolia moldava y Markel son objeto de duras críticas por parte del actual Gobierno moldavo, de tendencia proeuropea