
"No podemos llegar a extremos": Empresario armenio-venezolano sobre el arresto de Samvel Karapetián

El empresario industrial armenio-venezolano, Garabet Topalian, expresó su profunda tristeza por la situación política en Armenia tras el arresto del empresario Samvel Karapetián, destacando la importancia de la religión para la población del país.
"Me da mucha tristeza que entre armenios ocurra esto", aseguró en una entrevista a RT. "Nos parece que el sector político tiene una posición y el sector industrial tiene otra posición", señaló, agregando que en un lado se encuentra "el sector político representado por el [primer ministro] señor Nikol Pashinián, electo democráticamente", y en el otro, Samvel Karapetián, a quien describió como un empresario muy próspero que tiene una presencia muy fuerte en la nación y uno de los "hombres con mayor incidencia industrial".
En este sentido, expresó tristeza por la falta de entendimiento entre "dos sectores representativos" de la sociedad armenia y llamó al diálogo para resolver las diferencias, destacando que si no se puede encontrar un equilibrio, se aplique la tolerancia.
"Nosotros los armenios no debemos pelear. Armenio con armenio no debe pelear, podemos tener diferencias, pero no podemos llegar a extremos donde aprovecho mi poder para mandar a detener a otra persona", dijo.
Durante la entrevista, rechazó que estas situaciones involucren a la Iglesia y al patriarca Karekin II, explicando que para los armenios, como los primeros precursores del cristianismo, los patriarcas son la "autoridad religiosa" y merece respeto.
Esta semana, un tribunal de Armenia impuso a Karapetián un arresto por dos meses. El empresario fue acusado de incitar a la toma del poder, tras defender abiertamente a la Iglesia apostólica armenia, que fue criticada por el primer ministro del país, Nikol Pashinián. El arresto ha sido ampliamente condenado por diversas figuras políticas, religiosas y empresariales, tanto dentro como fuera de ese país del Cáucaso del Sur.