"No sé cómo llegó ahí": Habla el sospechoso de enterrar a un joven al lado de la casa de Cerati

El macabro hallazgo de un joven enterrado en el predio de la casa donde vivió el famoso músico argentino Gustavo Cerati no ha parado de ser noticia. Esta vez, por la primera declaración del sospechoso del crimen perpetrado contra un adolescente de 16 años en 1984.

Se trata de Cristian Graf, entrevistado este jueves en exclusiva por TN. Sus declaraciones ocurren un día después de que un juez rechazara indagarlo por el crimen, tras alegar que la Fiscalía debía sustentar mejor el expediente que lo vincula con la víctima: Diego Fernández Lima.

La decisión judicial le ha dado un respiro al sospechoso, que fue compañero de escuela de Fernández Lima. Graf, que ahora tiene 58 años, dijo que se encuentra "realmente muy mal" por la "situación en general" y la reacción de sus vecinos ante el hallazgo.

En su intervención, recalcó que el cuerpo había aparecido "en la medianía" entre su propiedad y la casa de al lado, en un intento por abonar la tesis de que los restos humanos no se encontraban en los linderos de su vivienda. "Estaba justo en el límite, es como agua territorial: no sabés", insistió.

"Soy parte protagonista porque me están implicando en una causa que no es mía, ¿entendés? Y encima, todo los que trae a correlación de los familiares, todo, porque salpica a todos lados", se lamentó Graf. En su alegato, insistió en que la causa ha prescrito. 

Inconsistencias

El periodista de TN confrontó varias veces a Graf y hasta llegó a decirle que no creía su versión. Uno de los hechos que le causan suspicacia es que el lindero de la casa se modificó después del crimen. De este modo, el punto donde se halló el cadáver quedaba 'legalmente' en la casa colindante.

"Todo fue al lado, nadie de la familia fue. ¿Cómo pasó? No sé", recalcó Graf. Al ser inquirido más a fondo por el periodista sobre la cuestión de los linderos cambiados, el abogado irrumpió en la escena para decir que era una "pregunta trampa".

El presunto implicado admitió que su interés es colaborar para esclarecer la verdad, aunque "igual va a a quedar todo como manchado". Al ser consultado por la prensa sobre su mensaje a la familia, Graf se limitó a decir que lamentaba lo ocurrido, pero que no tenía respuestas. 

Del mismo modo, negó que diera indicaciones a los obreros para que no sacaran un árbol de banano que estaba cerca del lugar donde luego fueron hallados los restos, como declaró un trabajador que consideró la exigencia como sospechosa. Según Graf, su pedido era que no tocaran la imagen de Santa Rita que tenía su madre en el jardín. Sin embargo, la figura religiosa terminó siendo retirada. 

"No sé"

Graf aduce que no recuerda a Fernández Lima. Ni de cómo era en el colegio, ni de su desaparición, ni de algún contacto con su familia durante su búsqueda. Destaca que no eran amigos ni compartían intereses comunes, y que todo lo que sabe es por lo que ha visto recientemente en los medios de comunicación. 

La trágica historia del joven encontrado enterrado en la casa de Gustavo Cerati

En su criterio, él es la víctima. El periodista le preguntó si creía que le "habían tirado un muerto", a lo que respondió: "La verdad que sí (...) Al pobre muchacho alguien lo enterró ahí y salió a la luz ahora por la obra. Si no, nunca te hubieras enterado de nada".

Ante la tesis de que el crimen lo hubiese perpetrado su padre o algún otro miembro de la familia, negó tajantemente: "No se me ocurre ni pensarlo". Para él, el caso se esclarecerá y sus allegados volverán a tener paz. Por ahora, ha pedido vacaciones en su trabajo para afrontar las averiguaciones.

Del mismo modo, descartó que Cerati tuviera alguna relación con el hecho porque apenas vivió a principios de este siglo en la propiedad colindante a la suya, es decir, muchos años después de que ocurriera la desaparición y posterior asesinato de Fernández Lima.