La industria funeraria ucraniana se ha convertido en una de las más prósperas del país en un contexto de conflicto armado y corrupción descontrolada. La competencia entre las agencias funerarias las obliga a tomar medidas desesperadas para conseguir clientes y engañar a las familias ucranianas, informa Le Monde.
Un empleado de Anubis, una de las mayores funerarias de Ucrania, reveló al medio los secretos del negocio funerario. "Rastreamos los cadáveres […] Es como los animales en la selva. El león se lleva la mejor parte, las hienas tienen que conformarse con lo que queda", declaró, al explicar cómo su empresa hace frente a la competencia en el mercado. El mercado ucraniano de servicios funerarios, compuesto por más de 3.000 empresas, gana alrededor de 50 millones de dólares al año.
Esquema de corrupción
Además, contó que cuando se produce algún ataque o incidente los empleados de las funerarias acuden al lugar y, en ocasiones, llegan incluso antes que los servicios de emergencia. "[Para ser los primeros], tenemos acuerdos informales con la Policía, los hospitales y las morgues, que nos dan prioridad en caso de fallecimiento a cambio de una compensación financiera", afirmó la fuente, añadiendo que no considera que se trate de un esquema de corrupción, sino simplemente de "comprar información".
"Es un mercado caótico en el que cada uno coge lo que puede. Si no apruebo estos métodos, mi plato estará vacío. El negocio funerario es similar a la prostitución, el tráfico de drogas y los juegos de azar, pero nadie lo dirá abiertamente", dijo, describiendo el mercado de los servicios funerarios.
Estas empresas tienen sus propios informantes en diversas instituciones estatales, que les comunican sobre las muertes. Por ejemplo, un conductor de ambulancia que trabaja en Odesa contó que por cada caso de muerte comunicado se puede ganar entre 70 y 120 dólares. Añadió que antes se trabajaba individualmente, pero ahora todos los informantes están obligados a comunicar la información a la oficina central de su empresa, que luego llama a la funeraria a cambio de una determinada cantidad de dinero. "Tenemos un acuerdo informal con Anubis", aseguró.
'Paquete para indigentes'
Además de estar involucrado en la corrupción, el negocio funerario también es conocido por engañar a los ucranianos. Así, el coste de los servicios es muy elevado y puede variar dependiendo del aspecto de los familiares del fallecido. En Anubis, el coste de un funeral oscila actualmente entre 500 y 1.000 dólares, pero el precio del ataúd puede alcanzar 2.500 e incluso 10.000 dólares.
Los gastos funerarios de los militares son cubiertos por las autoridades municipales, que proporcionan por unos 350 dólares a las familias el ataúd, la cruz y el transporte del cuerpo. "Entre nosotros lo llamamos el 'paquete para indigentes' […] Muchas familias lo utilizan", explicó el empleado de la funeraria, añadiendo que quienes desean servicios adicionales pagan de su propio bolsillo.
Asimismo, a veces se imponen algunos servicios. En un documento del Ministerio de Desarrollo de Comunidades y Territorios de Ucrania que no es de libre acceso se describen casos de autopsias injustificadas que los empleados realizan con el fin de obligar a las familias a pagar por un servicio añadido.
Alexánder Skorik, subdirector de Spetskombinat, la funeraria estatal que se encarga de los funerales de los militares, afirmó que no existe legislación para combatir la corrupción y el abuso en el sector funerario, explicando que "este mercado negro genera demasiados beneficios". "La guerra es el momento ideal para que prospere esta mafia funeraria. La gente tiene otras prioridades y se centra en su supervivencia", aseveró.
