Vladímir Putin advirtió del posible colapso de Ucrania en uno de los frentes en medio de la exitosa ofensiva de las fuerzas rusas en la provincia de Zaporozhie.
"[Las fuerzas rusas] avanzan rápidamente por el norte de la provincia de Zaporozhie, en la frontera entre las provincias de Zaporozhie y Dnepropetrovsk [...] Las tropas del grupo Este prácticamente rodean toda la zona fortificada de las Fuerzas Armadas de Ucrania desde el norte. Frente a ellas, por un lado, se encuentra nuestro grupo Dnepr, mientras que el grupo Este las rodea desde el norte. Esto podría provocar un colapso del frente en este sector", detalló el mandatario.
Putin enfatizó que si lo sucedido cerca de Kupiansk ocurriera en todos los sectores del frente —es decir, el cerco a las fuerzas ucranianas, su posterior destrucción y la liberación completa de la ciudad— entonces "el colapso del frente será inevitable" para el régimen de Kiev.
Liberación de Kupiansk
El pasado viernes, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que las fuerzas del país liberaron en una semana más de 15 localidades en la zona de la operación militar especial, incluida la ciudad clave de Kupiansk, ubicada en la provincia de Járkov.
La ciudad de Kupiansk se sitúa a orillas del río Oskol, a poco más de 100 kilómetros de la ciudad de Járkov, y se constituyó en un bastión clave de la defensa ucraniana en este sector del frente y en un importante centro logístico. Las colinas situadas en el margen derecho del río tenían, además, importancia defensiva para Kiev.
Su toma permite a las tropas rusas avanzar más al oeste de la provincia de Járkov. Decenas de localidades de la región ya están bajo control de Moscú, aunque algunas todavía permanecen en manos ucranianas. La liberación de Kupiansk sella definitivamente el destino de esas guarniciones.


