Manifestantes incendian la sede del Parlamento egipcio
Nueve manifestantes han muerto y más de 350 recibieron lesiones en una violenta jornada de enfrentamientos con las fuerzas de orden en El Cairo.
La Policía atacó, con la finalidad de desalojar, la acampada de un grupo de activistas que protestaban contra la permanencia de los militares en el poder. Desde hace más de dos semanas estaba instalada frente al edificio del Consejo de Ministros.
Los manifestantes, a su vez, lanzaron piedras y cócteles molotov contra las sedes del Gobierno y del Parlamento, lo que provocó un potente incendio en este último edificio. Además, volvieron a cerrar el tráfico en la plaza Tahrir, que había sido reabierto el pasado 11 de diciembre. Reclamaban que el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, sin dilatación, transfiera el poder a un gobierno civil.
Como respuesta, según testigos, militares vestidos de civil y con uniforme comenzaron a reprimir las protestas. Las fuerzas policiales, conforme se desarrollaba el enfrentamiento, fueron retiradas de los barrios adyacentes a Tahrir y se concentraron en alrededores de la Embajada de EE. UU. y del Ministerio del Interior para reforzar la vigilancia de esos recintos.
La víspera, se había llevado a cabo la segunda ronda de las elecciones parlamentarias y el país gozaba de una calma relativa. Este viernes las comisiones electorales en muchas regiones del país seguían contando votos.