La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, denunció este lunes que está en marcha una operación de falsa bandera contra su país, que sería preparada por Trinidad y Tobago y EE.UU.
Rodríguez manifestó que Caracas ya ha advertido que "está en curso un atentado de falsa bandera", que pretende atacar instalaciones en el país caribeño, con equipamiento militar de EE.UU., para culpar a Venezuela.
Durante sus declaraciones, la también ministra de Hidrocarburos ratificó que estos planes "evocan eventos del pasado" como el del Golfo de Tonkín, que generó la guerra contra Vietnam en el siglo XX. "Fue exactamente igual, un autoataque a un portaviones estadounidense".
Recordó que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, en días pasados reportó la "detención de un grupo de personas vinculadas a la CIA, que ya han suministrado información suficiente para denunciar esta nueva provocación que busca escalar la agresión de EE.UU. contra Venezuela".
"No es un conflicto, es una agresión militar contra Venezuela", ratificó.
"La guerra contra Venezuela"
La alta funcionaria venezolana aseveró que la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, desde que llegó al poder ha declarado la "guerra a Venezuela" y ha tenido una actitud "hostil y agresiva" contra el país vecino.
El Gobierno de Trinidad y Tobago, según Rodríguez, "se ha sumado a un plan guerrerista del Gobierno de EE.UU.".
"Lo más triste y bochornoso es cómo pretende deslindarse de los principios fundamentales de la Comunidad del Caribe (CARICOM), que rigen la vida de los países del Caribe, que han levantado las banderas por la paz, por preservar nuestro territorio libre de armas nucleares", señaló.
Frente a la actitud hostil de Puerto España, el Ministerio de Hidrocarburos de Venezuela y la directiva de Petróleos de Venezuela (PDVSA) proponen la "denuncia inmediata" del acuerdo de cooperación energética y la suspensión de todos los pactos gasíferos con Trinidad y Tobago.

Rodríguez hizo estas afirmaciones al término de una reunión entre el Ministerio de Hidrocarburos, que lidera; la junta directiva de PDVSA y la titular de Economía y Finanzas, Anabel Pereira Fernández.
Tensión creciente
Puerto España mantiene una relación hostil con Caracas y proclive a Washington. La primera ministra trinitense ha tenido un tono poco conciliador y aplaudió el primer ataque reportado por EE.UU. en el Caribe, en septiembre pasado. En esa oportunidad dijo que los narcotraficantes deberían morir "violentamente".
En otro dardo contra Caracas, la primera ministra aseveró que haría lo que fuese necesario "para mantener a salvo a la gente" de su país. Los dichos fueron rechazados por Caracas, que consideraron que la isla estaba "declarándole casi la guerra a Venezuela", aseveró el presidente Nicolás Maduro.
Las relaciones entre los dos países vecinos ya estaban sentidas desde junio, cuando las autoridades venezolanas anunciaron la captura de presuntos mercenarios con "lotes de armas de guerra", provenientes de Colombia y de Trinidad y Tobago.
En esa oportunidad, Persad-Bissessar dijo que no había "evidencia" que respaldara los comentarios de Venezuela, por lo que ordenó a su Guardia Costera a usar la "fuerza letal" contra cualquier embarcación no identificada proveniente del país vecino.
Frente a esa orden, Caracas hizo un llamado al Gobierno de Trinidad y Tobago a "no prestarse a juegos geopolíticos ajenos" a los intereses nacionales.
- EE.UU. desplegó en agosto frente a las costas de Venezuela buques de guerra, un submarino, aviones de combate y tropas, argumentando su supuesta disposición a luchar contra el narcotráfico. Desde entonces, se llevaron a cabo diez bombardeos a presuntas lanchas con drogas en el mar Caribe y el océano Pacífico, que dejaron decenas de muertos, entre ellos, según sus familiares, dos ciudadanos de Trinidad y Tobago.
- Los bombardeos contra pequeñas embarcaciones han sido criticados por los gobiernos de naciones como Colombia, México, Brasil y Venezuela, así como por expertos de las Naciones Unidas, que han señalado que se trata de "ejecuciones sumarias" contrarias a lo que consagra el derecho internacional.
- El representante permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, afirmó en una reunión del Consejo de Seguridad que las acciones estadounidenses en el Caribe no son ejercicios militares ordinarios, sino una "campaña descarada de presión política, militar y psicológica contra el Gobierno de un Estado independiente".


